MEXICO: Ordenan arresto alcalde por desaparición estudiantes
MEXICO.- La fiscalía mexicana ordenó este miércoles la captura del
alcalde de Iguala (sur) y de su esposa, a los que acusó por primera vez
de los ataques de su policía municipal contra decenas de estudiantes
hace casi un mes, en los que hubo seis muertos y 43 desaparecidos.
Mientras Jesús Murillo Karam, fiscal general, lanzaba esta acusación
en una conferencia de prensa en la capital, miles de manifestantes
protestaban en Iguala por la falta de noticias de los jóvenes y prendían
fuego a la alcaldía de esta ciudad situada a 200 km de Ciudad de
México.
Se pidieron órdenes de detención contra el alcalde de Iguala, su
esposa y su secretario de Seguridad Pública “en su calidad de probables
responsables como autores intelectuales de los hechos acontecidos en
Iguala”, dijo Murillo Karam, al frente de la investigación.
Esta es la primera ocasión en la que la fiscalía general, que tiene a
52 detenidos, identifica a presuntos autores intelectuales de este
crimen que ha causado conmoción dentro y fuera de México y que ha vuelto
a desnudar el drama de las más de 22.000 personas desaparecidas en el
país desde 2006.
Sobre la base de testimonios de detenidos, el fiscal señaló que el
alcalde José Luis Abarca dio la “orden de enfrentar” a los estudiantes
la noche del 26 de septiembre por temor a que sabotearan un evento
encabezado por su esposa como directora local de un organismo público de
protección a la infancia.
Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda, hermana de tres
narcotraficantes, son vinculados al cártel Guerreros Unidos, al que la
fiscalía acusa de intervenir en la desaparición de los estudiantes.
Al menos 22 miembros de la policía de Iguala, señalada de estar al servicio de Guerreros Unidos, están detenidos.
Siguen análisis de cuerpos
Los estudiantes de Magisterio de la cercana Ayotzinapa (Guerrero)
fueron atacados a tiros por policías cuando se habían apoderado de
varios autobuses para regresar a sus casas desde Iguala, a donde habían
acudido a recaudar fondos para su combativa escuela.
Según las investigaciones, 43 estudiantes que sobrevivieron fueron
entregados a Guerreros Unidos por policías de Iguala y de la vecina
comunidad de Cocula.
Sicarios de Guerreros Unidos confesaron desde prisión haber asesinado
y enterrado a estudiantes, pero la fiscalía advierte que no dará
crédito a esta versión hasta hallar a los jóvenes.
Murillo Karam explicó que el detenido Sidonio Casarrubias,
considerado el líder de Guerreros Unidos, dijo que esa noche fue
contactado por un lugarteniente en Iguala.
Según el relato del detenido, su colaborador habría confundido a los
estudiantes con miembros de un grupo delictivo rival, por lo que
Casarrubias “avaló” las acciones contra los jóvenes en “defensa de su
territorio”.
Alrededor de 2.000 militares y policías siguen a la búsqueda por tierra, agua y aire de los estudiantes.
Desde las desapariciones se han hallado nueve fosas clandestinas en
Iguala y alrededores con 30 cadáveres, precisó este miércoles el fiscal.
Los peritajes de la fiscalía determinaron que 28 de ellos no
corresponden a los estudiantes -aunque están siendo sometidos a otro
análisis de forenses argentinos independientes- y se siguen analizando
los dos restantes.
Incendio de alcaldía
México está acostumbrado a crímenes atroces desde el inicio de la
ofensiva militar antidrogas en 2006, pero el ataque contra estos
estudiantes ha generado una ola de indignación sin precedentes en los
últimos años.
Este miércoles fue convocada una nueva jornada nacional de protestas para exigir al gobierno que los encuentre con vida.
La manifestación más impactante tuvo lugar en la propia Iguala, donde
manifestantes incendiaron la alcaldía en medio de gritos contra el edil
y el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, a quien exigen la renuncia
por este caso y por no frenar la violencia en su empobrecida región, que
tiene los mayores índices de homicidios de México.
Un grupo de entre los miles de maestros y estudiantes que se
manifestaban, algunos encapuchados, prendió fuego a la alcaldía cuando
aparentemente no había trabajadores.
En el lugar no había presencia de los centenares de agentes federales
que están ahora al mando de la seguridad de esa ciudad de 140.000
habitantes.
Una gran manifestación estudiantil está convocada en la tarde en el centro de Ciudad de México.