Sorpresa en la Calle Ocho de Miami tras el anuncio de diálogo con Cuba
A FALTA TODAVÍA DE CONOCER LOS DETALLES SOBRE LA APERTURA DEL DIÁLOGO
CON LA HABANA, PORTAVOCES DEL EXILIO ARREMETIERON CONTRA “LA COBARDÍA”
DE OBAMA POR NEGOCIAR CON “PAÍSES TERRORISTAS” COMO CUBA
EFE
Miami (EE.UU.)
La sorpresa y la estupefacción eran las notas dominantes hoy en el
célebre Café Versalles de la Calle Ocho de Miami ante el anuncio un
diálogo entre Estados Unidos y Cuba con vistas al restablecimiento de
relaciones.
Numerosos medios de comunicación, algunos turistas y pocos miembros del
exilio se concentraron a primera hora en el café miamense tras conocerse
la puesta en libertad del estadounidense Alan Gross, preso en Cuba
desde 2009, y la de tres espías cubanos que cumplían condena en Estados
Unidos desde 2001.
A falta todavía de conocer los detalles sobre la apertura del diálogo
con La Habana, portavoces del exilio arremetieron contra “la cobardía”
de Obama por negociar con “países terroristas” como Cuba.
Nada más llegar al Café Versalles, y todavía con cara de sorpresa por la
sucesión de noticias que llegaban desde la Casa Blanca, el presidente
de Vigilia Mambisa, Miguel Saavedra, expresó a Efe su satisfacción por
la libertad de Alan Gross, pero criticó con dureza al presidente
estadounidense.
“Me alegra que Gross esté libre porque estaba muy enfermo, pero esto es
una derrota para Estados Unidos”, dijo Saavedra, presidente de uno de
los movimientos más radicales del exilio cubano en Florida.
Otro dirigente de Mambisa, Osvaldo Hernández, destacó que la puesta en
libertad del contratista estadounidense preso en Cuba se ha producido
porque “se estaba muriendo después de que injustamente Castro lo metiera
preso”.
“Me parece bien que haya venido a Estados Unidos para curarlo, pero
Obama es un cobarde por permitir la libertad de los espías. Ellos fueron
los asesinos de los Hermanos al Rescate”, aseguró Hernández.
Numerosos medios de comunicación se apostaron en el Café Versalles para
recoger testimonios de la comunidad cubana, ante el histórico anuncio de
la Casa Blanca de que Estados Unidos se dispone a abrir un diálogo con
Cuba tras más de medio siglo de ruptura diplomática.