CUMBRE DE LAS AMÉRICAS: Obama y Castro en un histórico encuentro
OBAMA TAMBIÉN TUVO CONTACTO INFORMAL CON NICOLÁS MADUROEFE
Panamá
El presidente de Cuba, Raúl Castro, dijo ayer a su homólogo de EE.UU.,
Barack Obama, que está “dispuesto a hablar de todo” en el proceso hacia
la normalización bilateral, durante la histórica reunión que mantuvieron
los dos en Panamá en el marco de la VII Cumbre de las Américas.
“Puede ser que nos convenzan de unas cosas y de otras no, no hay que hacerse ilusiones”, sostuvo Castro también.
Al afirmar que los dos países tienen que dialogar “con mucho respeto”,
el mandatario cubano reconoció que existen “muchas diferencias” entre
uno y otro Gobierno.
La esperada reunión, la primera entre dos presidentes de ambos países en
más de medio siglo, se realizó en una pequeña sala dentro del Centro de
Convenciones Atlapa de Panamá, donde se está celebrando la VII Cumbre
de las Américas con la presencia de los 35 países del continente y de
Cuba por primera vez.
Obama y Castro estaban sentados uno al lado del otro, en un formato
similar al que se usa cuando el mandatario estadounidense recibe a un
presidente extranjero en el Despacho Oval.
Es una reunión “histórica”, admitió el propio Obama, quien reconoció
también que la historia entre los dos países es “complicada”.
“Ahora estamos en condiciones de avanzar en el camino hacia el futuro”, subrayó el presidente estadounidense.
La reunión de ayer entre Obama y Castro estuvo precedida de una
conversación telefónica el pasado miércoles y estuvo centrada en revisar
el proceso para la restitución de las relaciones diplomáticas
bilaterales, que debe llevar a la reapertura de embajadas en Washington y
La Habana.
Esa apertura, para la que aún no hay fecha, también fue tratada en la
reunión de tres horas que celebraron el jueves en Panamá el secretario
de Estado de EE.UU., John Kerry, y el canciller de la isla, Bruno
Rodríguez, que hasta hoy había sido el contacto de más alto nivel
diplomático entre Estados Unidos y Cuba desde 1958.
Encuentro con Maduro
Los presidentes de Estados Unidos, Barack
Obama, y de Venezuela, Nicolás Maduro, mantuvieron ayer un diálogo
informal en el marco de la VII Cumbre de las Américas, informaron
fuentes diplomáticas.
Obama y Maduro coincidieron “casualmente” en un pasillo del centro de
Convenciones donde se celebra la Cumbre de Panamá y entablaron una
conversación a través de sus intérpretes, de unos diez minutos de
duración.
El presidente estadounidense le expresó a Maduro que desea que “se
establezca un diálogo pacífico entre las diferentes facciones políticas
en Venezuela”, explicaron a Efe las fuentes oficiales norteamericanas.
Obama reiteró, además, que Estados Unidos “no tiene interés en amenazar a
Venezuela, y sí en apoyar su democracia, su estabilidad y su
prosperidad” Fuentes diplomáticas venezolanas confirmaron el diálogo
pero no dieron detalles del mismo.
Durante su intervención ante la VII Cumbre de las Américas, Maduro
expresó su interés en tener una reunión con Obama y le propuso
reconducir las relaciones bilaterales a partir de un diálogo basado en
el respeto mutuo, pero condicionado en cuatro puntos, entre los que citó
“derrocar” el decreto con el que EE.UU. considera a Venezuela una
“amenaza”.
Emotivo discurso
El emotivo discurso del presidente de Cuba,
Raúl Castro, en su primera Cumbre de las Américas acaparó ayer la
primera sesión del cónclave, en la que los demás mandatarios saludaron
su acercamiento con EE.UU., al tiempo que condenaron las medidas del
Gobierno estadounidense contra Venezuela.
Con la frase: “ya era hora de que yo hablara aquí a nombre de Cuba”,
Castro inició un discurso que duró un poco más de 40 minutos, cuando la
intervención pactada era de 8 minutos.
Dijo en un tono jocoso “como deben seis cumbres que excluyeron, 6 por 8:
48” minutos tocaría hablar”. Castro hizo un relato histórico de
“agresiones imperialistas” a América Latina, pero exculpó de ellas al
mandatario estadounidense, Barack Obama.
(+)
OBAMA DICE GUERRA FRÍA YA TERMINÓ
Antes
de la intervención de Raúl Castro, habló el presidente de EE.UU.,
Barack Obama, quien dijo que su país “no será prisionero del pasado” con
Cuba ni con la región, al mostrarse convencido de que si continúa el
diálogo bilateral entre su Gobierno y la isla habrá progresos pese a las
“diferencias”.
Obama calificó la Cumbre de “momento histórico” y dijo que el
acercamiento entre EE.UU. y Cuba marca un “punto de inflexión” para toda
la región.
“La Guerra Fría ya terminó” y “no estoy interesado en disputas que
francamente empezaron antes de que yo naciera”, afirmó de manera
tajante.
Asimismo, Obama admitió que en el pasado la política de derechos humanos
de EE.UU. no siempre fue acertada, pero que, hoy por hoy, su país no
tiene interés en “inmiscuirse” cuando denuncia determinadas situaciones
que no considera justas, sino que lo hace porque considera que es “lo
correcto”.